En un comienzo, yo esperaba con esta creación simplemente dejar plasmado lo que en algunos días, en algunos momentos he sentido o experimentado. No importaba si nadie entendía.

Ahora con el tiempo, espero tocar algo de lo propiamente humano y no estar sola en esto que llamamos vida. Si no se entiende completamente, tampoco importa. En realidad, se trata de tocar algo en otros sin pretenderlo. Porque la verdad, no les mentiré, no escribo pensando en ustedes.

domingo, 22 de marzo de 2009

Un Hilo

Hay un hilo que se enrolla en mi tobillo.
Y es el mismo hilo que cubre tus rodillas.
Y es el mismo hilo que atraviesa mis venas.

Es ese hilo el que borda una historia de oriente, donde dos amantes se separan para ser mejores personas.

Es el mismo hilo que permite pescar sin llevar carnada.
Es el mismo hilo, que unas veces opáco y otras brillante, es visto siempre luminoso.

Y es ese hilo el que cubre mis rodillas, que atraviesa mi estómago y ahoga mi corazón.
Y es el mismo hilo que une mi historia, que quiere aprender sin hacerte daño.

Y es ese mismo hilo el que, cubriendo nuestros caminos, me recordará que algo nos une.
Y ese hilo es el que permite cruzar ríos y mirar atrás.

Es ese hilo el que da vueltas en mi cuerpo, el que entra y sale y dio una puntada por ti.
Y ese hilo es el que tejió una telaraña y sintió los movimientos, que vibró cuando se posaron en ella. Pero ese hilo es el que también sirve de trampa para una comida.

Sí, es ese hilo el que atraviesa, crea, rompe y une.
Ese hilo que lo único que quiere es que se cosa solo; que se dirija hacia su tela sin dolor, sin fuerza; que la tela sea suave y única.

Ese mismo hilo que escucho entre las palabras que te forjan.
Ese hilo que ha viajado por tus entrañas y que sin asco utilicé para coser mis mundos desperdigados.

Y es ese hilo el que se convierte en chal y me abriga.
Y es el mismo hilo que no se ve y me hace preguntarme de qué está hecho, para dónde va, de dónde viene.

Y es ese hilo que nos une, que envuelve mi cuello y que enrolla tu espalda.

domingo, 15 de marzo de 2009

Vuelve la calma cuando pienso en el intento
En cada esquina de esta ciudad no habito
En cada lugar convergen mis ideales
Y lo intento

Lo juro, lo intento
pero quiero deslizarme por las calles
Quiero avanzar sin presión
En cada esquina de esta ciudad me rindo


Lo juro y lo intento
Vuelve la paz cuando pienso en el intento
En cada lugar de esta ciudad, sueño
Y lo intento

Con cada paso lo intento
y dejo atrás la perdición
Me acerco hacia el olvido

lunes, 2 de marzo de 2009

Con el tiempo aparecen los ídolos
Con el tiempo aparecen los idiotas

En el momento se hace difícil distinguir
En el momento se me hace difícil decidir

Con el tiempo las cosas se ordenan
Con el tiempo las cosas se frenan

En el momento hay que decidir
En el momento hay que respirar

domingo, 1 de marzo de 2009

Aquí, en las sombras naranjas
con neblinas rojizas, se canta una canción
Se abre un escenario y se invita un ron

Las luces cambian, de azul a lila
Dos miradas que se evitan y se acercan
hay que hacer como si nada

Focos que lanzan verdes y grisáceos
mesas de mantel marrón
Copas se cruzan entre los labios y el sudor

No hay nadie, nadie te ve
Entre colores y formas, nadie te ve
¿Quieres que te vean, quieres que te inviten?

sábado, 28 de febrero de 2009

Mientras llenas de gracia lo que recibe tu aliento
Mientras irradias energía por donde pasas
aún existen ojos que te ven
no hay forma de pasar desapercibido

Mientras digas lo que quieras y no hay nada que decir
Mientras sueñas sin pensar demasiado
aún existen límites que se imponen
No hay manera de ser etéreo

viernes, 27 de febrero de 2009

Miro el brillo de mi objeto de equilibrio
La puntería de no saber qué hacer
La seguridad que estoy haciendo y deshaciendo

Con la luz de las velas, viajo
Viajo tan lejos que no volveré
Viajo tan alto que no caeré

Sonrío ante el objeto de mi deseo
La violencia de actuar en silencio
El miedo que contengo y expulso

Con la luz de tus ojos, viajo
Viajo tan lejos que no volveré
Viajo tan alto que no caeré

jueves, 26 de febrero de 2009

Nos emocionamos de nuestras conversaciones
Pero somos de los que actuamos poco

Se expande mi visión
Las yemas de mis dedos sangran
Mis huesos duelen
Y no saco nada con decir algo

Reclamamos por la diferencia
pero somos de los que nos integramos poco

Mi oído tiembla
Mi lengua se contorsiona
Mi olfato se paraliza
Y saco algo con decir nada